Cuatro pseudo-músicos, fanáticos de Beethoven, conforman un cuarteto de cuerdas muy particular. La acción transcurre en la casa de Anselmo, quien se hace llamar Johann, durante un ensayo muy intenso, el día antes de una anheladísima presentación en televisión. En el cuarto de al lado, la esposa de Johann está agonizando. Los quejidos e interrupciones de la mujer, generan una tensión cada vez más profunda y menos soportable para nuestros músicos.
La puesta propone una estética cargada de teatralidad, con una fuerte composición de personajes, en la que el humor negro se adueña del lenguaje, y donde seguramente, florecerá la reflexión.
“Cuarteto” es ante todo, una metáfora maestra acerca de la insensibilidad, la indiferencia y la intolerancia. Una obra de humor ácido y corrosivo sobre la crueldad. Una mezcla de humor negro entre la risa y el espanto.