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Yasmina Álvarez, actriz: "El teatro asturiano tiene una deuda pendiente con Javier Villanueva"
El teatro asturiano tiene una deuda pendiente con Javier Villanueva. Lo dice con firmeza Yasmina Álvarez, la actriz que emprendió el camino, junto a él, en la compañía de Teatro Pausa, ya desde que el dramaturgo impartía clases en Los Dominicos y ella era su alumna. Será una de las personas que hablen en el homenaje que le brindará Lieres a Villanueva mañana a las 21 horas en la XXXVIII Semana del Teatro en el Auditorio de Pola de Siero. Será antes del estreno del espectáculo “Medea” de Etelvino Vázquez, quien fuera su compañero de profesión y pasión y que también le dedicará unas palabras.
Javier Villanueva falleció el pasado mes de mayo, con 76 años, debido a una enfermedad degenerativa que se agravó en los últimos tiempos. Nació en Lieres, y siempre mantuvo mucho arraigo con su localidad de origen. Cuenta Elisa Lobato, hija del también recién fallecido actor José Antonio Lobato, que recuerda cuando su padre iba a comidas a casa familiar en el pueblo y volvía más enamorado, si cabe, de su oficio.
En el mundo del teatro empezó en los años 60, en pleno franquismo, donde los espacios de libertad estaban restringidos y la escena no era una excepción. “Hizo frente a la censura y escapó de los grises. Siempre fue contestatario. Siempre nos contaba la anécdota en la que estaba estrenando una obra en un espacio de Oviedo y al pie del escenario estaban colocados un montón de policías, para llevárselo si algo iba mal”, rememora Álvarez. La actriz reconoce que parte de lo que es ahora se lo debe a él: fue quien le hizo vencer su timidez y subir a un escenario, desde el que, desde entonces, “no se bajó”.
Villanueva compaginó su actividad artística con sus estudios de Magisterio, Filosofía y Letras. Dirigió en sus comienzos, en los años 60, el teatro de la Facultad de Filosofía y Letras, y el de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid, además del Aula de Teatro del Ateneo de Oviedo. También tuvo numerosos reconocimientos, como en el año 2005 cuando recibió el premio “Buero Vallejo” con su obra “Yo no quiero ser Macbeth”.
“Siempre decía que el teatro era un veneno que tenía dentro”, señala Álvarez. La concejala de Cultura, Aurora Cienfuegos, también citó ayer, en la presentación del homenaje, estas mismas palabras. “Será un acto sencillo. No es sólo porque naciera en Siero sino también por toda su contribución a la literatura asturiana”, indicó. Y de esta forma, están un paso más cerca de saldar la deuda a la que hace alusión Yasmina
