"La Venganza de la Xana" es uno de los grandes clásicos del teatro popular asturiano donde su autor, Eladio Verde, mezcla leyendas y personajes mitológicos con los ambientes y tipos característicos de su teatro. A lo largo de los tres actos se descubren historias de amor sobrenaturales que sobreviven al paso de los siglos e historias más terrenales. En la obra se presentan personajes entregados a los demás y otros interesados en sacar beneficio propio hasta caer en el ridículo. Hay escenas donde se desarrollan tradiciones populares y se suceden otras de contenido más dramático.
La Compañía Asturiana de Comedias estrenó hace una semana esta obra en el teatro Jovellanos de Gijón y la presentó en el XXIX Salón de Teatro Costumbrista de Candás el pasado viernes. Retoman esta "fantasía teatral" para ofrecer una versión actual capaz de traer a nuestros días las historias y las formas de ser que se entendían como características de la Asturias de los años 40 del pasado siglo, cuando se estrenó.
La experiencia compartida del elenco de la prestigiosa compañía, donde conviven cinco generaciones que abarcan 70 años de diferencia, permite asegurar que esas esencias "se mantienen como lugares comunes de nuestro pueblo".
En este caso, "La Venganza de la xana" se presenta con versión de Sergio Buelga, que dirige la compañía y actúa con un personaje que no está en la versión original de Eladio Verde. Se trata de un criado maltratado por su amo desde hace trescientos años de todas las formas imaginables. Este personaje aparece en la obra "para reforzar la trama", según explica el propio Buelga.
Una Xana se había enamorado de un hombre, y la Coruxa para dejar libre el camino al Busgosu (que también pretendía a la Xana) encantó al joven para que permaneciese sin memoria durante 300 años. La Xana decidió que se encarnaría en el alma de una joven hasta que el mozo recobrase la memoria.
Ya pasaron los 300 años y el mozo es Juan y la Xana es Adela. La Coruxa y el Busgosu tratarán que no se vean para que éste último se pueda llevar a la Xana. Además, otro personaje, la gran Xana, le impondrá un castigo por desobedecer las leyes de las Xanas que les impiden enamorarse de un mortal. Por el medio de la obra también se introduce la historia de Magalla, Pepa y la hija de éstos, Concha, además de Careta y Blas que se pretenden casar.
La obra mantiene el halo mitológico del texto original de Eladio Verde, que unió leyendas y personajes de la mitología asturiana con lo característico del costumbrismo asturiano.
Destacada la actuación de Manuel F. Rodríguez y entre los secundarios Mar Buelga, Norberto Sánchez y Belén Sánchez construyen buenos personajes dignos de mención, aunque todo el elenco está a la altura incluida la del joven Pedro Fernández. La especial mención es para una emocionada Josefina Rodríguez, viuda del gran Arsenio González que desde el pasado año es, con su eterna sonrisa, la imagen del logotipo del Salón.