En un bajo de la calle Toreno de Gijón los actores y actrices de la Compañía Asturiana de Comedias se preparan para su gran vuelta al Teatro Jovellanos tras el paréntesis de la pandemia. Es el local en el que desde hace décadas pule sus obras el conjunto escénico más antiguo de la región. Su primera función documentada fue en Oviedo en 1920, aunque su existencia podría remontarse a cinco años antes. Tuvieron su mayor época de popularidad antes de la contienda civil y en la postguerra, poco a poco, volvieron a hacer reír a cientos de asturianos en unos años marcados por la "fame" y la tristeza. En la década de los 50 la Compañía vivió un nuevo periodo de esplendor que les llevaría a girar por el continente americano. Pili Ibaseta y Josefina García ya estaban ahí, y a sus 84 y 86 años cumplidos, siguen sobre las tablas. Ambas esperan con ilusión que el paño del coliseo gijonés se alce hoy para acoger "Telva y Pinón", la obra escrita por el dibujante Alfonso Iglesias sobre sus personajes más célebres.
"Criámonos en el Alto Pumarín y empezamos juntes de chavalines", rememora Josefina, viuda del actor Arsenio González y que interpreta a Belarma en esta pieza. Su compañera, Pili, lamenta no poder meterse en la piel de su Teresona: "Ando un poco pachucha, pero préstame estar aquí con ellos" -afirma-. También viuda, en su caso del que fue alma del grupo hasta su fallecimiento, el recordado Eladio "Lalo"Sánchez, evoca que se conocieron en plena gira americana. Ahora comparten ensayos y escenarios con artistas de la edad que ellas tenían cuando empezaron, como la benjamina Rocío Quintana: "Me crié en la compañía y llevo ya tres años actuando. Me gusta mucho, somos como una familia", declara. Lo son en cuanto a complicidades y afectos, pero también en la realidad. La joven que encarna a Raitana -la sobrina de la pareja protagonista- comparte tablas con su madre Belén Sánchez, que da vida a Telva. Y Pinón es José Manuel Rodríguez, hijo del actor que encargó a Alfonso Iglesias esta obra.
"Estrenóse en el añu 43, cuando los personaxes de Alfonso yeren ya mui populares. Nesta versión, como en toles que facemos, respetamos el orixinal, pero suprimiendo detalles que agora podíen tar un poco fuera de sitiu, cuestiones de sexismu o coses d esi tiempu que nun entendería el públicu de güei", explica Sergio Buelga, director de la Compañía y director. Uno de los cambios, acordes con la mentalidad actual, está en el mismo título: "Quisimos poner a Telva delante, porque además representa el papel que teníen les muyeres antiguamente en Asturies, una sociedá casi matriarcal", apunta el adaptador.
En el elenco de la obra, es mayoría la presencia femenina y como señal de la evolución de los tiempos en un grupo de teatro tradicional, en la ropa de calle que llevan al ensayo dos de las actrices destacan sendas camisetas, una con el mensaje "Puru remangu" y otra con el logo del grupo musical Bad Girls. El carácter costumbrista del teatro que representan también parece requerir una revisión, ya que como apunta Lluis Antón González -Don Nicolás en la obra y otro veterano como su compañero Armando Felgueroso-: "A veces miróse de llau esti xéneru y ye realmente popular, sigue tando vivu y teniendo un públicu, ye parte de la nuestra cultura como la tonada, el baile o otres formes tradicionales. La xente identifícase con ello y col asturiano que fala". De su popularidad la muestra es el ritmo al que van la venta de entradas para esta función que hoy se estrena, a las 20.30 horas, y mañana repite pase en el Jovellanos.